Se suspende oficialmente la Bajada de La Virgen 2020

El Obispado, reunido la pasada semana para tomar una decisión con respecto a la celebración de la Bajada de la Virgen, anuncia que se suspende la celebración de la LXVIII Bajada de La Virgen de Las Nieves para las fechas previstas este 2020. Se trata de una decisión que ha sido previamente consultada con los responsables del Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma, como anfitrión y encargado de la organización de La Bajada de La Virgen; el Cabildo Insular de La Palma y los párrocos palmeros.

Así lo ha anunciado hoy en una comparecencia en directo el Obispo Bernardo Álvarez Afonso, quien también ha indicado que dada la repercusión “religiosa, social, cultural y económica” de las Fiestas Lustrales, “se prevé la celebración con todos los componentes habituales en una fecha que se decidirá cuando finalice la emergencia sanitaria”. Asimismo, el Obispo ha anunciado que, en caso de que en lo que queda de año las circunstancias lo permitiesen, se podría realizar algún acto “estrictamente religioso”.

El gobierno local ha informado de que “el Obispado trasladó su decisión al alcalde y presidente del Organismo Autónomo de la Bajada de la Virgen, Juan José Cabrera, que expresó su conformidad con los criterios expuestos por la Iglesia, al coincidir plenamente con el sentir del Ayuntamiento sobre la conveniencia de suspender los actos en un momento en el que la lucha contra la pandemia para salvar vidas es el único objetivo prioritario”.

El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma, a través del concejal coordinador de las Fiestas Lustrales, Tony Acosta, tomó la decisión hace ya meses, incluso antes de que fuera una obligación, de cerrar la sede del Organismo Autónomo de la Bajada de la Virgen 2020, trasladando su personal a tareas municipales, además de suspender la totalidad de los ensayos de los diferentes actos tradicionales que estaban previstos desarrollar este verano en honor de la Patrona y frenar las negociaciones abiertas para la contratación de artistas e infraestructuras necesarias para los eventos de ocio.

El estado de alarma que ha generado la crisis sanitaria del coronavirus desde el pasado 14 de marzo, ha obligado a la suspensión de todo tipo de actos públicos, independientemente de su índole, como medida de prevención ante la propagación de la pandemia. Se trata de una medida que ha afectado a numerosos eventos en la Isla de La Palma y que, tal y como se preveía, ha obligado al aplazamiento, tras 68 celebraciones initerrumpidas, de las Fiestas Lustrales de la Bajada de La Virgen 2020.

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