Garafía inicia una recogida de firmas en Change.org para no perder a su vicario episcopal

Distintos colectivos de la Villa de Garafía, apoyados por el Consistorio local, han iniciado una recogida de firmas en el portal Change.org, con la que pretende paralizar el traslado del vicario parroquial, Rubén Gallego del Pozo, al municipio vecino de Barlovento.

La petición, dirigida al obispo de la diócesis, Bernardo Álvarez, destaca que la gran mayoría de la población del municipio es mayor, y que son pocos los jóvenes que en éste pueblo habitan. Además señala que se trata de un pueblo rural y aislado con pocas posibilidades de ocio.

Igualmente indican que el sacerdote "lleva dos años siendo nuestro cura y ha combinado a la perfección sacarle una sonrisa a nuestros mayores y disfrutar con nuestros jóvenes, a la misma vez que colabora con todos los actos que se organizan en el municipio, sin dejar atrás sus responsabilidades como cura".

"No queremos que nos lo quiten", se indica en Change.org,  "él es feliz con nosotros y nosotros con él. Estamos acostumbrados a que nadie quiera venir a vivir aquí, porque es lejos, porque es campo, porque no hay nada. Y ahora que alguien se quiere quedar y hace que los que vivimos aquí seamos un poquito más felices, a ese se lo quieren llevar, es injusto", para concluir que si esa es la voluntad de Dios, "es injusta también".

Desde que el sacerdote se despidiera de sus fieles en pasado domingo, la gran mayoría de los vecinos de Garafía, incluido su Ayuntamiento en las redes sociales, están lamentando el traslado del que era su vicario parroquial, Rubén Gallego del Pozo, al municipio vecino de Barlovento, y apenas dos años después de su nombramiento.

Desde las redes sociales el Ayuntamiento garafiano califican el día de despedida del vicario parroquial como "día triste para los vecinos de Garafía", y añaden que "nos han arrebatado a nuestro cura, al nuestro sí, al que queremos con nosotros".

Incluso, señalan que Rubén Gallego del Pozo "ha llegado a nuestros corazones con su particular forma de ser, por su cercanía su colaboración y sobre todo por la labor que ha hecho por nuestros jóvenes".

Desde el Ayuntamiento de Garafía se califica como "triste" la decisión que provocó el traslado del sacerdote al municipio vecino de Barlovento, y de "impotencia y rabia" los sentimientos que tienen muchos jóvenes del municipio por la pérdida de su párroco.

El sacerdote, de 37 años, fue nombrado vicario parroquial de las comunidades de Puntagorda, Tijarafe y Garafía en octubre de 2014, y dos años después ha sido nombrado párroco de Barlovento.

Fotografía: Jonatan Rodríguez